La diversificación de las firmas tecnológicas es infinita.
Las grandes empresas de este sector no tienen ningún miedo a “interferir” en
sectores inexplorados para ellas.
Es el caso de Microsoft que en un momento en
que cada vez está más en entredicho uno de sus productos más famosos, Internet
Explorer, ha decidido probar suerte en el mercado de las SIMs.
La compañía creada por Bill Gates ha publicado a través de
su tienda en línea Cellular Data, un producto que permite mediante Windows 10
estar conectado incluso cuando no hay conexión Wifi. Con esta información
muchos han deducido que la empresa está trabajando en su propia tarjeta SIM.
De este modo el servicio requeriría contratar un plan de
datos, tener un teléfono con Windows 10 y la no nata tarjeta SIM de la firma.
Resulta un paso sustancial para la firma que no hace ni cinco años adquirió la
compañía escandinava Nokia para indagar en el mercado del hardware.