La competencia entre teléfonos móviles inteligentes o
smatphones es cada vez más ingente. Solo hay que echar un vistazo a las últimas
cifras de ventas para corroborarlo. Hace tan solo un año Samsung y Apple copaban
casi el 50% de las ventas mundiales y, sin embargo, a finales del tercer
trimestre de 2014 "solo" alcanzaron a vender el 38% de los terminales
móviles.
Asimismo, es probable que esta tendencia continúe en los próximos
trimestres. ¿La razón? La fuerte irrupción de los modelos de marcas chinas,
cada vez con más calidad y con precios mucho más ajustados que los de las
marcas tradicionales. De hecho, 6 de los 10 primeros vendedores a nivel mundial
provienen de marcas originarias del gigante asiático.
El mercado español no es ajeno a esta tendencia mundial y
las marcas chinas también empiezan a ocupar puestos altos en cuanto a cifras de
venta. Otra característica del mercado español ha sido el notable aumento en la
venta de smartphones libres.. Esto se debe a que cada vez más, el consumidor
español ya no tiene acceso a terminales subvencionados por las operadoras. En este
sentido, a partir de ahora, buscar el terminal deseado y comparar precios entre
las distintas tiendas le puede suponer un ahorro muy significativo.
Los smartphone triunfan entre los españoles
En España, la penetración del smartphone se sitúa en torno
al 70%, la más alta de Europa. El 80 % lo utiliza para leer el correo (emails) y
para chatear o enviar mensajes (WhatsApp), cerca del 70% para conectarse a las
distintas redes sociales y un 60 % para leer la prensa. Incluso hay una parte
nada desdeñable de la población española, sobre un 14%, que lo utiliza para las
compras online. Otras actividades diarias son el uso como cámara, como
navegador en el coche o cuando se pasea por la ciudad. Para todas estas
actividades es cada vez más importante el tamaño de la pantalla, que la mayoría
de consumidores tiende a elegir lo más grande posible. De hecho, esta ha sido
la tendencia en la que se ha movido el mercado español: hemos pasado de las
3" a las 6" de algunos phablets actuales.
Los Phablets, que son modelos a caballo entre un smartphone
y una tablet, con una pantalla de 5,5 pulgadas o superior, tienen un precio elevado,
ya que de media cuestan unos 670 euros.
Los modelos de alrededor de 5 pulgadas tienen un precio
medio de 335 euros. En esta categoría no hemos seleccionado los modelos top de
gama, que son bastante más caros (con una media de 550 euros).
Aquellos smartphones con la pantalla más “pequeña”, es decir
los que rondan las 4
pulgadas , cuentan con un precio más bajo. Su coste medio
se sitúa en torno a los 270 euros, que se eleva hasta los 350 euros si dentro
del mismo grupo incluimos el modelo de Apple.
Marcas chinas como Huawei empiezan a popularizarse entre los
españoles
No compre nunca menos de 4 GB de memoria Interna.
Pregúntese cuál es la utilidad que va a darle a su teléfono
móvil antes de adquirir un modelo u otro. En primer lugar, debe fijarse en el
sistema operativo que incluye el terminal que desea comprarse. Por ejemplo, cada
sistema cuenta con su propia tienda de aplicaciones. Las tiendas de Apple y
Android disponen deuna gran variedad de apps, mientras que en el caso de
Windows, si bien incluye las principales, su oferta es bastante más reducida.
Por otra parte, la memoria del teléfono puede jugar un papel
importante, ya que no solo se usa para almacenar los archivos multimedia (fotos
y videos) sino también todas las apps. Tenga en cuenta que los que tienen menos
de 4GB, aunque contemplen el uso de una tarjeta SD externa, hay muchas apps que
no pueden moverse a esa tarjeta SD. Asimismo, a pesar de que haya memoria libre
en el teléfono para almacenar archivos multimedia, a veces, el espacio
disponible para instalar aplicaciones es aún más reducido y, si tiene menos de
1GB, al cabo de un tiempo no podrás ni siquiera actualizar las apps
pre instaladas. Si esta memoria es muy pequeña (menos de 1GB), al cabo de un
tiempo no podrás instalar más apps o actualizaciones.
En el caso de algunos móviles, la diferencia de precio entre
varios establecimientos puede llegar a los 400 euros. Es lo que ocurre en
smartphones como el LG G Flex. Sin llegar a estos casos tan extremos, sí es
habitual diferencias de precios superiores a los 100 euros entre las tiendas físicas, e incluso más si nos fijamos
en las tiendas online.