La red social Twitter ha presentado una demanda contra el
gobierno de los Estados Unidos porque considera que su programa de vigilancia de
las redes sociales vulnera la libertad de expresión.
Twitter desafía así las normativas actuales, al impedir
revelar información concisa sobre peticiones del gobierno para ceder datos de
usuarios.
La demanda, presentada esta primera semana de octubre en
California, arguye que el usuario tiene derecho a saber el alcance de las peticiones
de datos personales.
Para ello, hace referencia a la preocupación pública por los
documentos que a filtrado el excontratista de la Agencia Nacional de Seguridad, Edward
Snowden, que evidenciaron una masiva vigilancia de los servicios de seguridad
estadounidenses.
Ben Lee, el abogado de Twitter ha dicho en su blog, "Opinamos
que estamos protegidos bajo la Primera Enmienda de los EE.UU (libertad de expresión) a la hora
de responder a las inquietudes de nuestros usuarios y a las manifestaciones de
funcionarios del gobierno sobre proporcionar información en torno a la
vigilancia del gobierno de Estados Unidos."
El mes de abril pasado, Twitter facilitó un listado de
Transparencia al gobierno de EE.UU. para su publicación, no obstante, los
funcionarios han negado que la empresa les haya solicitado compartir el informe
completo al público.
"El gobierno de EE.UU. proporciona amplios pero
incompletos discursos sobre la dimensión de sus actividades de vigilancia encuadradas
dentro del ámbito de la seguridad nacional", comenta Twitter, además añade
que "a la vez prohíbe a los proveedores de servicios como Twitter suministrar
su propia perspectiva" sobre las peticiones del gobierno.
La obligación de proteger los datos.
A pesar de que Twitter recibe un menor número de solicitudes
del gobierno relacionados con la seguridad nacional que Google, la Unión de Libertades Civiles
de los Estados Unidos, dice que la demanda interpuesta por Twitter, puede
llevar a otras empresas del sector a actuar de la misma manera. Jameel Jaffer,
subdirector de cuestiones legales de la
ONG , ha afirmado en un comunicado que "Confiamos que
otras compañías tecnológicas sigan los pasos de Twitter",
"Las compañías del sector tecnológico tienen el deber y
la obligación de proteger la información sensible de sus usuarios contra la extensa
vigilancia gubernamental y de ser sinceros con sus clientes en relación a cómo
su información personal está siendo utilizada y compartida", añade Jaffer.
Varias de las empresas tecnológicas más grandes de Estados
Unidos han estado resistiéndose a solicitudes del gobierno para que faciliten
datos privados de sus usuarios, entre ellas Google, Facebook, Microsoft y
Dropbox.
Otros, como es el caso de Apple, han tomado iniciativas para
eludir las solicitudes del gobierno optando por encriptar los datos de sus
usuarios de tal forma que los pongan lejos del alcance de las autoridades
gubernamentales.